Llegan los meses de verano y con ellos lo más divertido para los bebés y los que pueden disfrutar de verlos chapotear en piscinas y playas. Si le pones en casa o en el jardín una piscinita hinchable o un barreño lejos del mundanal ruido puede que hasta lo bañes en cueros, como dicen las abuelas, sin pañales acuáticos ni bañador, que todo queda en casa.
La gracia viene cuando vamos a la piscina pública, a la piscina del hotel o la que algunos suertudos tienen en la urbanización. El famoso mito de que te perseguiría una mancha que colorea el pis que se te escape en el agua de la piscina a algunos nos ha seguido hasta que hemos sido mayores. Ahora que eres mamá o papá, mientras haces planes y la maleta de verano, no quieres ni imaginarte la escena si le ocurre a tu pequeño donde quiera que os deis un baño refrescante.
También es gracioso ver cuando, por novatos, metemos a nuestros peques en el agua con el pañal normal, el de siempre, el pañal desechable cotidiano, y al sacar al bebé del agua parece que está sentado en una enorme nube blanca: es su pañal a todo lo que da de absorción. Vamos a ayudarte con esto hablando de pañales acuáticos para que puedas equiparte de manera a no tener situaciones embarazosas vinculadas a las necesidades, fisiológicas en el caso que nos ocupa, de tu bebé.
¿Cuándo y cómo usar pañales bañadores?
Los primeros años de los niños traen como característica común la gestión de las necesidades de los pequeños, esas ligadas básicamente a su digestión. Hay situaciones cuando aún no controlan sus idas al baño que te hacen querer pedir que te trague la tierra, por muy natural que ese incidente sea. Este tipo de pañal puede ayudarte a que eso no ocurra nunca.
Primero tienes que definir la ocasión para la cual vas a necesitar un pañal acuático. Si vas a la playa o a la piscina. Para empezar en una piscina debes informarte antes de las normas que imponen, si los niños que aun no controlan esfínteres pueden bañarse o no, y, en el caso de que sí puedan, si exigen un tipo determinado de bañador al que habrá que acompañar con un pañal que evite catástrofes como la contaminación por heces de una piscina pública.
Seguro que no es nuevo para nadie y todos somos conscientes de que esos pequeños accidentes ocurren y los presenciamos al menos una vez por verano. Lo mejor es evitar cualquier fuga de bañador y hay padres que consideran necesario incluso combinar pañales acuáticos con bañador especial antifugas o bañador ajustadito pero normal. La cuestión es retener las excreciones al menos el tiempo de cambiar al pequeño evitando contaminaciones incómodas para todos los usuarios de la piscina y para nosotros mismos, porque vaya rato…
Para gustos los colores de los pañales bañadores
Hay variedad de marcas y modelos de pañales de baño y no te costará mucho elegir si tienes claros algunos conceptos. Estos pañales se ajustan perfectamente a los muslos y cintura de tu pequeño, además son un poco más finos y elásticos que el pañal normal y son más cómodos para moverse dentro del agua.
Es genial ver los diseños que proponen la mayoría de las marcas. Casi todos llevan estampados con sus personajes de dibujos animados favoritos, son alegres y coloridos pasando perfectamente por un bañador normal y corriente (que también es importante), solo que este además lleva un extra de seguridad y de higiene para que todos disfrutemos de nuestro baño.
Siguiendo las tallas por edades y peso de tu peque, compra el que más gracia te haga y prevé la cantidad necesaria para cada talla teniendo en cuenta los meses que vas a poder llevarlo a la piscina, que cuando crecen les pueden apretar dejándoles marca y molestando a la circulación de sus piernas. Suelen ser paquetes con pocas unidades, pero no son baratos así que calcula bien.
Hay dos casos en los que no te van a servir: en niños recién nacidos, por lo difícil que es que se ajusten siendo tan chiquitines y con esos muslos todavía finitos; y cuando el niño tiene algún problemilla intestinal, por razones obvias (como que un pañal tiene un límite de absorción).
Recomendación: lleva varios en la bolsa de piscina o playa de tu bebé, siempre prima la comodidad de nuestro bebé y su higiene es lo más importante.
¿Mejor pañales acuáticos desechables o reutilizables?
Nuestro consejo es que, aunque optes por los reutilizables, tengas de los dos. ¿De qué depende?
Del número de niños que debas atender a la vez, por ejemplo. Si tienes varios niños pequeños y tienes que gestionar sus pañales para el baño, una de dos: o tienes muchos pañales reutilizables que tendrás que acumular usados en un recipiente hermético hasta que estés libre como vigilante y puedas ir a lavarlos; o ten de los desechables para poder cambiar los usados rápido y no quitar ojo de ningún niño en la piscina.
Los pañales reutilizables pueden durar años gracias a sus broches, que permiten ir ajustando el pañal bañador a su crecimiento. Están hechos, además, de telas de poliéster que permiten la transpiración de la piel de los niños a la vez que se ajustan bien por su elasticidad.
Lo mejor es que pueden ir a la lavadora; así que con vaciar lo sólido y echarlos al bombo es suficiente y nada traumatizante para los padres más delicados. Eso sí, hazte con bastantes para poder cambiarlos; si pasas todo el día en la piscina y el niño aún es muy pequeño para darse cuenta de que se ha hecho caca pueden desbordar o irritar la piel del pequeñín.
El mejor consejo sobre pañales acuáticos
Ahora que sabes en qué consiste un pañal acuático, un bañador pañal o pañal para el baño te aconsejamos que te hagas con una buena bolsa y un completo kit para disfrutar del veranito. Si nos lo permites añadiremos otra vez un consejillo porque queremos que disfrutéis a tope de cada experiencia con vuestros bebés: cuidad la seguridad.
La seguridad siempre es lo primero cuando hablamos de niños en piscinas o playas, la combinación niños y agua requiere ser previsor para poder gestionar el baño de manera eficaz y fiable tanto a nivel de seguridad como de higiene.
Si además consigues ser más respetuoso con el medio ambiente usando pañales reutilizables, chapó. Tenemos todo tipo de ajuares para que nuestros niños disfruten, saber combinarlos y estar bien abastecidos nos ayudará a tener vacaciones de verdad.